Existen muchas razones muy lógicas del por qué leer la Biblia. Pero últimamente lo he hecho por una en especial: ” a veces siento que conozco muy poco de Dios “. ¡No me basta!
Quiero conocer más de él. Quiero reemplazar cada uno de los mandatos que el mundo me ha impuesto por los verdaderos que Dios me ha dejado. Quiero seguir a Jesús con todas mis fuerzas y quiero darle la oportunidad a Jesús de seguirme en mis pensamientos.
No cabe duda de que siempre hay algo impactante en este Libro maravilloso. A través de su estudio logro ver una esperanza CLARA y FIEL. Fuera de él estoy propensa a sentirme enferma y deshauciada pero dentro del mar de La Palabra de Dios; El Verbo siento que soy una mujer de propósito, que cada día vale y que:
Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera<span class="crossreference" data-cr="#ces-RVR1960-27652A" data-link="(A)” style=”font-size: 0.625em; line-height: 22px; vertical-align: top; color: rgb(0, 0, 0); font-family: "Helvetica Neue", Verdana, Helvetica, Arial, sans-serif;”> con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.
– Hechos 20:24
… Nuestra prioridad ahora es otra, cuando entregamos nuestra vida completita a Dios y para Dios.